Hoy en día la mayoría de las mujeres deciden someterse a un aumento de busto (también conocido como mamoplastía de aumento), ya sea para mejorar la apariencia de sus mamas, para elevar el pecho caído, para corregir alguna deformidad o para aumentar la confianza en sí mismas.
Este tipo de intervención quirúrgica es la más demandada por mujeres de todas las edades, suponiendo que ocupa el tercer lugar en las cirugías plásticas más solicitadas en México, según la UNAM.
Si estás interesada en este tipo de procedimiento, estos son los 5 datos que debes saber antes de realizártelo:
¿Qué tipos de implantes mamarios existen?
Los implantes mamarios pueden clasificarse por su forma.
- Redondos: Como su nombre lo dice, son de forma redonda y no tienen ni principio ni fin, lo que resultará tener un polo superior más lleno y por ende un busto más redondo.
- Anatómicos: Los cuales tienen un pico y una base, lo cual genera una caída más pronunciada, por lo que generará un resultado más natural.
¿Tendré cicatrices?
Un aumento de busto se realiza mediante una operación quirúrgica, y como casi todas las que se realizan, éstas dejan una cicatriz y no es posible evitarla, pero gracias a una técnica refinada y meticulosa, son de excelente calidad y casi imperceptibles con el paso del tiempo. En función de la vía de abordaje utilizada la cicatriz puede localizarse en la areola o la zona inframamaria (surco submamario).
¿Perderé sensibilidad?
La recuperación de la sensibilidad es total en la mayoría de los casos. Ésta sí se verá afectada al principio, tras la operación, pero poco a poco se recuperará por completo. Aunque el tiempo de recuperación varía entre una paciente y otra.
¿Cuánto tiempo tardaré en recuperarme?
La recuperación varía en función de la paciente, pero lo normal es que a los 7 o 10 días ya estés recuperada. Se necesita reposo relativo durante los primeros 4 días. Además, durante el primer mes deberás realizarte controles continuos, usar un sostén postoperatorio y no realizar ejercicio para asegurar la correcta cicatrización.
¿Deberé someterme a más operaciones en el futuro para sustituir los implantes mamarios?
No, ya no hace falta entrar a quirófano para sustituir los implantes cada cierto tiempo, ya que éstos son para toda la vida. Todos hemos oído la afirmación de que hay que cambiar los implantes mamarios cada 10 años, sin embargo esta información está ya desactualizada, ya que conforme la ciencia avanza las prótesis son mejores y más duraderas. Lo que sí será importante es llevar a cabo las revisiones periódicas para comprobar que los implantes están bien. Estas revisiones deberán realizarse aproximadamente cada 5 años.
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